Ya ha pasado más de un mes desde el lamentable tiroteo sucedido en la escalera Robb de Uvalde, sin embargo aún siguen saliendo informaciones que confirman que las fuerzas del orden actuaron de forma negligente durante y antes del tiroteo.
Entre los hallazgos realizado sobre la respuesta policial, se confirmó que un policía de la ciudad de Uvalde armado con un rifle vio al presunto tirador antes de que ingresara a la escuela y lo tenía en la mira de su arma, pero esperó el permiso de un supervisor, dándole al sospechoso la oportunidad de ingresar a la escuela.
El «oficial no escuchó una respuesta [en su radio] y se volvió para obtener la confirmación de su supervisor. Cuando se volvió para dirigirse al sospechoso, el sospechoso ya había entrado por la puerta exterior del pasillo oeste a las 11:33:00», extracto del informe realizado por una evaluación de Capacitación avanzada de respuesta rápida para el cumplimiento de la ley de la Universidad Estatal de Texas.
“En este caso, el oficial habría escuchado disparos y/o informes de disparos y observado a un individuo que se acercaba al edificio de la escuela armado con un rifle”, dijo la evaluación. “Un oficial razonable concluiría en este caso, basado en la totalidad de las circunstancias, que se justifica el uso de la fuerza letal”.
Existieron numerosas oportunidades de evitar o al menos minimizar la tragedia de la escuela Robb, sin embargo con el paso del tiempo siegue quedando evidenciado la pobre respuesta de las fuerzas del orden de Uvalde.